Tradicionalmente, la sociedad ha tratado muy mal a las personas mayores, a las que, en función de una serie de estereotipos obsoletos, siempre se ha asociado con aspectos negativos como las enfermedades, soledad, residencias, fragilidad y dependencia.

Todo esto hace que nuestra predisposición hacia este colectivo esté condicionada, que nuestro trato hacia ellos esté lleno de prejuicios y no les permitamos, por ejemplo, tomar decisiones o les inutilicemos o les tratemos, incluso, como a niños pequeños.

Con el objetivo de inculcar una imagen positiva de las personas mayores, en un entorno de tolerancia y para evitar el abuso y maltrato en la vejez, el Grupo Adavir, empresa especializada en la gestión de centros para mayores, ha presentado un decálogo que fomenta el respeto hacia este sector:

1.- Respeto a su libertad: Lo primero que hay que hacer es reconocer sus derechos, sus potencialidades y su capacidad de decisión. Para ello es fundamental escuchar sus necesidades y sentimientos.

2.- Protagonista de un cuidado adecuado: El respeto a la dignidad de una persona dependiente pasan por proporcionarle una alimentación adecuada, una higiene correcta, medicamentos necesarios y asistencia médica cuando se requiere. Del mismo modo, si las circunstancias lo permiten, la persona mayor debe ser cuidada como ellos mismos quieren que les cuiden.

3.- Evitar el aislamiento: Es vital que las personas mayores sigan en contacto y disfrutando con su familia y amigos.

4.- Solidaridad intergeneracional: Educar a los más pequeños en el respeto y la ayuda mutua permitirá una cohesión total entre todas las edades.

5.- Trato igualitario y respetuoso: Se torna fundamental evitar un trato peyorativo. No hay que hablar a una persona mayor como a un niño o como si tuviesen un déficit de comprensión. Lo más correcto es dirigirnos a ellos con educación y normalidad.

6.- Romper con los estereotipos negativos: Hay que destacar el valor de “una vida llena de experiencia y conocimiento”, tener claro que ser mayor no es sinónimo de ser una persona enferma ni dependiente o que cumplir años significa disfrutar de la vida con pequeñas limitaciones capaces de superar en el día a día. Es fundamental incrementar su autoestima permitiéndoles que nos transmitan su experiencia vital en forma de consejos o conocimiento.

7.- Envejecimiento activo: Es muy importante mantener la autonomía y la independencia realizando en la medida de sus posibilidades actividades cotidianas, gratificantes y saludables. Esto es clave para que se sientan felices.

8.- Crear lazos de afecto y empatía: Todos necesitamos sentirnos escuchados y queridos. Preocuparse por cómo se sienten las personas mayores genera emociones y sentimientos por ambas partes.

9.- Involucrar en los nuevos tiempos: Estamos obligados a integrar a nuestras personas mayores ante la evolución y los cambios en la sociedad con el fin de evitar que se sientan inútiles o desplazados.

10.- Imagen positiva en los medios de comunicación: Su tratamiento contribuye, considerablemente, en la percepción que tiene la sociedad de las personas mayores. Hagamos entre todos que la imagen mejores.