Si algo bueno tiene la crisis económica que vive España es que está obligando a miles de trabajadores, empresarios, emprendedores y autónomos a pensar en formas alternativas de desarrollar modelos de negocio que permitan sacar adelante un proyecto empresarial. En definitiva, está obligando a evolucionar.

En este sentido, lo último es el Coworking, que, a falta de una definición unánime, es una forma de trabajo que permite a profesionales o pymes de sectores diferentes compartir un mismo espacio de trabajo (físico y virtual) para desarrollar sus proyectos profesionales de manera independiente. Además, este sistema fomenta la realización de proyectos conjuntos con otros trabajadores (a partir de ahora coworkers).

Estas oficinas compartidas se llaman espacios de Coworking, pero, ¿cuáles son las ventajas de este sistema? La primera, y más inmediata, que parece obvia, es que al compartir un mismo espacio varios profesionales se reducen costes. Hay que recordar que contratar un espacio de Coworking es más barato que el alquiler de una oficina.

Estos espacios, también permiten ahorrar al coworker al alquilar el puesto de trabajo sólo por el tiempo que se necesite. Si se quiere una semana, se pagará únicamente por ese tiempo. Del mismo modo, al compartir necesidades con otros trabajadores, se pueden contratar ciertos servicios de manera conjunta.

Por otra parte, la interacción con los compañeros de oficina es también beneficiosa, ya que aportarán ideas frescas e innovadoras precisamente por tratarse de profesionales de distintos campos. Esto ofrece una gran diversidad de opiniones y conocimiento y también de networking, ya que los nuevos ‘vecinos’ pueden hacer aumentar los contactos, tanto en el plano profesional como en el personal.

Es destacable que, a nivel personal, estos espacios ofrecen al trabajador flexibilidad, la posibilidad de organizarse el horario como mejor convenga, ya que la mayoría de estas oficinas compartidas abren las 24 horas del día, los siete días de la semana. También aportan motivación para trabajar, porque te ayuda a crear una rutina de trabajo, y tranquilidad, al librarte de todas las distracciones que uno se encuentra cuando trabaja desde casa.

Igualmente, un último beneficio de los denominados espacios de coworking es que interactúan entre sí aportando ventajas a sus coworkers en materia de formación y aprendizaje con la organización de cursos y talleres.